Lo que un día fue twitter

La red social antes llamada twitter ahora X te envía un recordatorio del aniversario en que creaste tu cuenta, este año cumplí 15.

Por mucho tiempo fue mi red social favorita, antes de que llegaran los anuncios, los videos, las preferencias de contenido y la monetización. Considero que no tengo un estilo específico para usar mis redes, pero twitter la usaba con frecuencia para aspectos académicos, sí, ¡académicos! Por un tiempo me gustaba tuitear conferencias o seminarios de matemática educativa, luego colaboré con un programa de radio de divulgación de ciencia y tecnología tuiteando los programas dominicales. También conocí algunos colegas de la disciplina que se volvieron amigos, con alguno de ellos realicé colaboraciones académicas. En mis inicios en tuiter fui testigo de personas que se ofendían de lo que otros ahí escribían (considero que eso sigue vigente), pero más aún, se creaban historias macabras de las inferencias que hacían sobre esos tuits. También recibí insultos por twitter, hasta “importante” me sentí. Lo que me atrapó de twitter fue la demanda de síntesis y las habilidades cognitivas que ponía en juego para tuitear en tiempo real (el caso de los seminarios y del programa de radio). También encontraba y hasta hoy lo encuentro interesante, el poder político que otorga a personas y colectivos. Le sigo llamando twitter aunque ya no lo uso tanto, me satura el exceso de videos y los anuncios publicitarios, ya no lo siento mi lugar seguro.

En los últimos dos o tres años he encontrado interesante seguir publicaciones sobre metodología de la investigación, he identificado algunos investigadores que brindan sugerencias interesantes al respecto. Pero quizá la magia de twitter y por lo cual no lo abandono es por el encanto de saber que escribir un tuit es como hablar al aire, no esperas una lectura ni una respuesta, solo expresas tus pensamientos o sentimientos, para mi es su uso más cautivador. El uso político en la academia merece un post aparte. 

El Marqués, Querétaro, 9 de febrero de 2025